• El coordinador de Iguales Biobío, Carlos Torres, acompañó a Daniel Durán – a quién se le negó la posibilidad de inscribir a su conviviente civil como carga en la Caja de Compensación Los Andes- a apelar.
  • Durán espera que el fallo sea revisado por la Corte Suprema y así se siente precedente sobre esta materia para que ninguna familia vuelva a ser discriminada.

A las 13.30 horas en punto llegó Carlos Torres, coordinador de Iguales Biobío, a acompañar a Daniel Durán, su conviviente civil Lizardo Gutiérrez y los/as abogados/as de ambos, José Ignacio Castillo y Catalina Cánovas, hasta la Corte de Apelaciones de Concepción para presentar una apelación en busca de que su caso sea revisado por la Corte Suprema.

Durán denunció que el pasado 15 de enero la Caja de Compensación Los Antes le negó la posibilidad de inscribir a su conviviente civil como carga familiar. En esa oportunidad, la negativa fue respaldada por la Superintendencia de Seguridad Social (Suseso), quién aseguró que la carga familiar es un beneficio sólo para los y las cónyuges, por lo que excluiría a los y a las convivientes civiles.

“Como Fundación Iguales nos entristece y nos preocupa que este tipo de situaciones se den en una ley que lo que busca, es asimilar los derechos de las parejas del mismo sexo, protegerlos y protegerlas. Hoy acompañamos a Daniel y a Lizardo porque su familia no está siendo resguardad por la ley, no está siendo tratada como las demás familias. Es por eso, que esperamos que la Corte Suprema marque precedentes en estas materias y  que ninguna otra familia se vea vulnerada en sus derechos”, dijo el coordinador de Iguales Biobío, Carlos Torres.

Una de las abogadas de la pareja, Catalina Cánovas, explicó que “esta apelación busca que la Corte Suprema conozca nuestra causa y pueda revertir este fallo, ya que es imperioso que se reconozca el derecho a la igualdad ante la ley y se rechace la discriminación arbitraria que Daniel y Lizardo están sufriendo”.

Durán asegura que “lo más grave aquí es que no se nos está reconociendo como familia, se está haciendo una discriminación arbitraria entre cónyuges y convivientes civiles que no debería existir, pues la ley nos reconoce a todos/as como familia”.

En esta línea es que Durán asegura que: “No estamos luchando sólo por nosotros, sino que lo hacemos para que esto no le vuelva a ocurrir a ninguna familia. No queremos que esto se replique en todos/as aquellos/as que está contrayendo o contraerán una unión civil”.